miércoles, 18 de febrero de 2015

Lo nuevo en tarima flotante

Los suelos o tarimas flotantes han ido adquiriendo un lugar bastante relevante en la arquitectura de la mayoría de los hogares, debido a muchos factores y ventajas que los han popularizado mucho.

Esto pisos o suelos laminados damos claridad que no tienen el nombre de tarima flotante ni tampoco parquet sintético o tarima flotante sintética como son llamados comúnmente hasta por los profesionales de la construcción y ellos son mucho más económicos que la madera a la que imitan, son muy sólidos gracias a su estructura en capas.

Están regulados por la norma UNE-EN 13329, donde son nombrados como “Revestimientos de suelos laminados, Elementos con capa superficial en resinas amino plásticas termoestables. Con sus especificaciones, requisitos y métodos de ensayo”.

Estos suelos laminados son láminas que se fabrican con materia prima procedente de la madera y que se unen con resinas de gran densidad que los hacen resistentes a la humedad, los golpes, rasguños y raspaduras.

Normalmente  la base de las tarimas flotantes está hecha de una combinación de fibras de gran consistencia, con una capa o manto decorativo imitando dibujos y texturas de madera y una capa transparente para protegerla, cuando  se desgastan o deterioran no se puede acuchillar como se hace con la madera.

Les dan indebidamente el nombre de tarima flotante porque su instalación es flotante, no se pega a la base y las piezas se unen con Click y también pueden ser encolados o clavados.

Al momento de tomar una decisión para comprar los suelos laminados para cualquier superficie se debe tener en cuenta que hay diferencias en la calidad y los suelos laminados de calidad tienen múltiples ventajas.

Para el buen mantenimiento del suelo laminado y que tenga una larga vida cuando se presenten accidentes y se derraman algunas sustancias aun las más difíciles no se deben utilizar  esterillas de goma u otros objetos de limpieza como cepillos y demás, porque estas manchas son muy fáciles de retirar con un trapo húmedo, se puede utilizar limpiador especial para estos pisos, pero no se deben usar productos que contengan aceite o la cera que se usa en otros pisos y se debe usar ruedas suaves en las sillas de los escritorios.

Los muebles no dejan marcas en estos pisos, pero se debe tener el cuidado de alzar los muebles para trasladarlos de un lugar a otro, nunca arrastrarlos o empujarlos, es recomendable pegar algún material como discos de fieltro en las patas de las sillas y mesas o escritorios.

También son muy resistentes a la luz y el color del suelo laminado permanece invariable, pero en aquellos sitios  donde se ensucia fácilmente o desgastan los pisos por el tráfico de personas como las entradas principales, lo ideal es colocar un tapete o esterilla para evitarlo.

Especialmente se debe evitar que queden residuos de agua en aquellos lugares donde haya plantas en macetas o los grifos del agua.

Para limpiar el suelo laminado normalmente, se utiliza la mopa, una escoba o la aspiradora. Las manchas grandes o las huellas de zapatos se limpian muy fácilmente, es aconsejable hacerlo con un paño húmedo muy bien escurrido y evitar  los productos de limpieza que no son adecuados para ellos, esto asegura larga vida a sus suelos laminados.